Aspecto: El cavalier es un perro bien proporcionado, con un cráneo casi plano entre las orejas. Su hocico es corto y ancho, y va estrechándose. Su nariz es negra. Tiene los ojos grandes, marrón oscuros y redondos, no saltones. Sus orejas son grandes, con largos pelos ondulados. La es bastante larga, tiene largos pelos algo ondulados. El pelaje es largo, sedoso y sin bucles, eso sí, ligeramente ondulado. Puede ser de cuatro coloridos diferentes: rojo, blanco con marcas rojas, negro y fuego, o tricolor (negro, fuego y blanco). Su tamaño estándar es de 32 a 36 cm . Debe pesar de 5.5 a 8 kg . Suele vivir hasta los 11 años aproximadamente.
Comportamiento: El cavalier siempre es amable, tanto con los humanos, como con los perros, y busca siempre el contacto para hacer amigos. En cuanto a los niños, es el compañero ideal: ni demasiado blando, ni demasiado bruto. Es poco ladrador y se adapta a todos los medios, no le importa estar en el campo o en la ciudad. Quiere mucho a su amo, soporta muy mal la soledad, y tiene necesidad de que una presencia casi permanente, aunque no dispongamos de demasiado tiempo para dedicarle. Es muy elegante, prefiere acompañar a su amo a lugares muy ruidosos antes que tener que quedarse solo en casa. Cuando está en casa es muy tranquilo, aunque cuando sale al campo le gusta dar grandes paseos.
Aptitudes: Tiene un carácter extraordinariamente equilibrado, escucha a su amo y muestra gran inteligencia. Por ello, el cavalier es un habitual en las pruebas de obediencia. Se toman muy en serio los ejercicios y saben ejecutarlos correctamente. A veces también destacan en pruebas de agilidad.
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